Vicios de la raza: etnicidad y disputas por el comercio urbano. El caso de los comerciantes chinos en el puerto de Guayaquil y su zona de influencia (1880-1946)

A finales del siglo XIX, el presidente ecuatoriano Antonio Flores Jijon emitio un decreto oficial que prohibia la entrada de subditos del Celeste Imperio a territorio nacional. El decreto contemplaba la amenaza de expulsar a los chinos que estaban asentados ya en los poblados de la costa en el caso de convertirse en una amenaza para la seguridad nacional. El documento, paradojico e irrealizable, contenia el anhelo de la patria joven de vincularse a relaciones geopoliticas con paises “desarrollados” y situarse en ese lugar privilegiado del globo: Occidente. Este mismo discurso, cargado de imagenes de abyeccion y rechazo, seria replicado por los comerciantes del puerto de Guayaquil, quienes pretendian monopolizar el espacio comercial de la ciudad, y sus zonas de influencia, poniendo como pretexto la raza.